Llegará el día en que no seamos.
El día en que todo se desvanezca.
Y los recuerdos sean murmullos
que ya nadie entienda.
El sol iluminará extensiones grises
y casi nada conservará el impulso de moverse.
Todo lo que fue habrá perdido su significado.
No quedará arte ni lengua.
Ni siquiera sensibilidad para apreciarlos.