Ayer, este blog cumplió dos años. En todo este tiempo, mi relación con él ha cambiado muchas veces, y desafortunadamente, en el último año no he podido publicar el mínimo de un texto mensual que me había propuesto. Con ello contaba desde el principio porque la literatura no me da de comer.
Sin duda, la mayor utilidad de mantener este espacio es que me ayuda a filtrar mis escritos, sacando algunos del olvido y descartando otros definitivamente. Por si a otros escritores que me leen les sirve, toda la gestión de los textos la llevo en Evernote, etiquetando como pendientes los que aún no he publicado. Es muy útil como almacén previo.
Todos los años, por estas fechas, publico un cuento de Navidad. Podéis leerlos aquí, pero os advierto que no tienen nada de típico. Espero que os gusten. Gracias a todos por acompañarme.